mi viejo

Hoy hace unas horas exactamente fue uno de esos días o mejor dicho momentos en los que como popularmente se dice todo da vuelta.
Recuerdo muy bien como de chico, mi viejo me subía sobre su regazo y me permitía manejar, o las veces que después de llegar de su laburo cansado jugábamos penales bueno todo esto nace ya que hoy él cumplió mi rol de bailarín como cuando yo era chico.
Cursaba quizás los 8 años de vida mas o menos cuando mi papá mientras estaba parado me hacia parar sobre el sus empeines y así bailamos el vals gracias a el aprendí a bailar y me pude defender a la hora de ser atacado por las quinceañeras que querían bailar, bueno pero eso no tiene nada que ver, en fin paso el tiempo y esto no se volvió a repetir hasta que hace unos meses quise repetir lo que hacía de chico, pero como ya estoy grande casi le rompo el pie para peor tenia un dedo medio roto.
Pasaron los meses y la nostalgia de aquellos pasos que mi viejo me había enseñado iban creciendo, fue hoy que me decidí, le dije que ponga sus pies sobre mis empeines y fue así que danzamos recordando esos momentos que marcaron mas que buenos, tiernos y lindos recuerdos sumándose a esto las risas interminables que por el hecho obvio del giro de la vida eran mas que obvias.